jueves, 27 de noviembre de 2008

Pubilla


La vi un Once de Septiembre, con su traje típico, brillaba por encima de la multitud pese a su pequeña estatura, recogía las flores que le daban para depositarlas cuidadosamente debajo de un monumento, el sol que impactaba en su cara no hacía más que resaltar esos cabellos canos y esa sonrrisa que regalaba a todo el mundo que en tiempo pasado habría sido una bendición.

1 comentario:

_MeiA_ dijo...

m'encanta aquesta fotografia. Aquesta dona segur que se sentia la reina de la festa, la més guapa de totes! i segurament que ho era.